Un expediente que se encuentra en la Procuraduría General de Justicia de la Ciudad de México detalla lo que las llamadas Goteras ‘Vip’ les hicieron a algunas de sus víctimas: hombres que eran drogados (al parecer con gotas oftálmicas) y al despertar habían sido despojados de sus pertenencias.
Uno de los hombres que fue víctima de estas seductoras mujeres, fue un ingeniero marroquí de nombre Hassan “A” quien al despertar supo que su noche de aventura no terminó como esperaba.
Las mujeres a las que él y su amigo supuestamente habían conquistado en el bar La Chilanguita, en Polanco, en realidad eran unas ladronas.
SEGUIR LA FIESTA
Según informes de la PGJCDMX, el ingeniero en telecomunicaciones y unos amigos, también marroquíes, fueron al bar ubicado en presidente Masaryk.
En el lugar entablaron amistad con tres jóvenes mujeres, bebieron un poco con ellas y luego ellas les propusieron seguir la fiesta en un hotel.
El ingeniero las invitó a su departamento ubicado en Lago Zúrich, ahí fue donde los robaron, detalla el expediente (CI) CI-FMH/MH2/UI-1S/D1544/12-2017.
El hombre narró que cuando iban rumbo al departamento pasaron a una tienda para comprar cervezas. Sin embargo, no se las vendieron por la hora y sólo compraron chocolates.
“LOS OBLIGARON” A COMER CHOCOLATES
Casi al llegar al departamento, una de las mujeres les dijo que llamaría a un taxi Uber para que les consiguiera las cervezas. Así sucedió: el supuesto Uber llevó las botellas hasta el departamento.
El ingeniero narró que las mujeres entraron al baño por unos minutos y al salir los sedujeron y “casi los obligan” a comer chocolates. Sólo les dieron unos sorbos a las cervezas y entonces comenzaron a perder el conocimiento.
“Mi amigo se quedó dormido, traté de despertarlo dándole cachetadas, pero no reaccionó… eso es lo último que recuerdo”, declaró el hombre. Cuando recuperó el conocimiento ya los habían asaltado.
Ellas los drogaron con una sustancia que agregaron a chocolates y a unas cervezas, los desmayaron y al final los robaron.
Cuando pudo reaccionar, descubrió que las jóvenes se llevaron teléfonos celulares, dos computadoras, relojes y carteras. Casi 100 mil pesos de botín.
Fuente: Excélsior