Un grupo de ‘hackers’ que se hace llamar REvil ha publicado un primer lote de correos electrónicos que aseguran contiene información que puede comprometer la campaña electoral del presidente de EU, Donald Trump, tras exigir un rescate de 42 millones de dólares, según Forbes.
Los informes señalan que los ciberdelincuentes se infiltraron en los sistemas informáticos de la prestigiosa firma de abogados de Nueva York Grubman Shire Meiselas & Sacks.
De allí aseguraron haber extraído una gran cantidad de información relevante de celebridades como Madonna, Lady Gaga, Bruce Springsteen, Nicki Minaj y del propio Trump, y exigieron inicialmente un rescate de 21 millones el jueves, pero la cifra se duplicó un día después al no haber recibido el pago.
De la próxima persona que publicaremos es de Donald Trump. Hay una carrera electoral en marcha, y encontramos una tonelada de trapos sucios, advirtió el grupo.
Además, alertaron a los votantes señalando que después de tal publicación, ciertamente no querrán verlo como presidente, estableciendo máximo una semana para el pago que no se concretó.
PRIMERA ADVERTENCIA
Después de que el FBI clasificara las amenazas como un acto de terrorismo internacional, los piratas informáticos al parecer enviaron una primera advertencia.
Publicaron en la Internet profunda enlaces para tres descargas web y proporcionaron una contraseña para acceder a ellas.
Sí Trump, aquí está la primera parte de los datos, señalaron.
Esos enlaces de descarga condujeron a un total de 169 correos electrónicos que de alguna manera mencionan al mandatario estadounidense. Tal como lo advirtieron, al parecer estos primeros documentos son inofensivos y no hay nada incriminatorio en ellos.
Sin embargo, el grupo concluyó con una nueva advertencia aparentemente dirigida al inquilino de la Casa Blanca.
Me apresuraría. En el lugar de su oponente, compraría todos los datos y los pondría al inicio de las elecciones. Eso sería divertido. Pero puedes adelantarte a él, escribieron sugiriendo que podrían subastar los datos.
En tanto, la firma de abogados sostiene que Trump no es ni ha sido cliente suyo.