Javier Jiménez Espriú, próximo secretario de Comunicaciones y Transportes, indicó que el destino del Nuevo Aeropuerto Internacional de México (NAIM) se definirá mediante una consulta participativa, pues legalmente no se puede hacer una consulta ciudadana formal.
Al tener participación en la Cumbre “The Economist” 2018, dijo que será una decisión difícil pues no hay opciones buenas.
Señaló que no habrá preguntas técnicas, sino que la población emitirá su opinión sobre cuestiones sociales como el costo o el impacto ambiental y urbano.
Indicó que independientemente de la decisión que se tome, no habrá un nuevo aeropuerto terminado en los próximos 5 años, por lo que el próximo gobierno deberá invertir en rehabilitar el aeropuerto actual.
En entrevista afirmó que tienen pensado realizar la consulta con el apoyo de una casa encuestadora privada a la que se le pagará con los recursos que fueron destinados al proceso de transición.