El presidente del gobierno español, Mariano Rajoy, sufrió ayer una agresión sin precedente en plena campaña para los comicios generales del domingo en España.
El jefe del Ejecutivo y aspirante del Partido Popular (PP) a la reelección recibió un fuerte puñetazo de un joven, cuando por la tarde daba un paseo por la ciudad de Pontevedra, Galicia.
El agresor es el joven A.V.F., de 17 años, al que la policía arrestó inmediatamente y que los medios vinculan con el independentismo gallego y una rama radical del club de futbol de la ciudad. “Estoy muy contento de haberlo hecho”, dijo tras ser detenido.
EL JOVEN SE ACERCÓ A RAJOY COMO SI FUERA A HACERSE UNA SELFIE Y LE PROPINÓ EL GOLPE EN LA CARA, QUE LE TIRÓ Y ROMPIÓ LAS GAFAS Y LO DEJÓ ATURDIDO.
“¿Cómo ha podido pasar esto?”, preguntó en voz alta el líder del PP. Los hechos sucedieron en el centro de la ciudad de Galicia en la que ha pasado gran parte de su vida y de donde es su esposa.
A través de la red social Twitter, Rajoy confirmó que se encontraba bien y pidió: “Sigamos construyendo”.
Los partidos políticos respondieron rápidamente a lo sucedido con expresiones de solidaridad con Rajoy.
El rey Felipe VI se puso en contacto con él para interesarse por su estado y sus principales rivales en las elecciones del domingo expresaron una rotunda condena del ataque.