MESA DE REDACCIÓN
Varios miembros del jurado que declaró culpable al mexicano Joaquín El Chapo Guzmán la semana pasada por narcotráfico en Estados Unidos, leyeron sobre el caso a través de los medios y redes sociales, rompiendo las reglas impuestas por el juez, aseguró uno de ellos de forma anónima a la publicación Vice.
En una entrevista, uno de los jurados declaró bajo anonimato que él, así como otros de sus compañeros, acudía constantemente a las redes sociales de los periodistas que cubrían regularmente el proceso contra el capo mexicano, que terminó con un veredicto de culpabilidad.
PODRÍAN PEDIR LA REPETICIÓN DEL JUICIO
De confirmarse que varios de los miembros del jurado leyeron sobre el caso del líder del Cártel de Sinaloa en los medios de comunicación, formándose una opinión previa a las deliberaciones, la defensa del mexicano podría pedir la repetición del juicio.
Según la fuente, que pidió anonimato, los miembros del jurado mintieron al juez del caso Brian Cogan sobre su exposición a la cobertura en la prensa del juicio en varias ocasiones.
La más sonada sería cuando, el fin de semana previo al inicio de las deliberaciones, se publicaron ciertos documentos judiciales que aseguraban que Joaquín Guzmán Loera había pagado por mantener sexo con niñas.
TRISTES Y HORRORIZADOS
Según este miembro del jurado, se enteró por Twitter de que el magistrado podría reunirse con ellos, así que avisó a los otros miembros del jurado que, si habían visto lo que sucedió, mantuvieran una expresión serena y lo negaran.
El jurado asegura que dicha información no influyó en la decisión final que tomaron, ya que muchos de ellos se sentían tristes por la idea de que Guzmán pasara el resto de su vida entre rejas y otros horrorizados porque la Fiscalía empleara a narcotraficantes en su caso contra el capo.
De los 56 testigos que presentó la Fiscalía, 14 se trataban de testigos cooperantes que fueron detenidos por tráfico de estupefacientes.
Además, el miembro del jurado también declaró que rompieron otra de las reglas del juez al comentar el caso una vez terminadas las jornadas, mientras volvían a sus casas o en los descansos de las sesiones.