Localizado a 35 kilómetros de Zimapán, Hidalgo, La Encarnación es una comunidad que desde hace varios años está pasando desapercibida.
Calles desiertas y viviendas abandonadas son parte del paisaje de este pueblo.
“Un pueblito donde es minero, donde en su apogeo estas partes de las casas que aquí hay alrededor fueron tiendas de raya, aquí fue un pueblo donde hubo bastante comercio, todas las comunidades no tenían ramal, y aquí venían de muchos lugares”.
Con el paso del tiempo La Encarnación se fue quedando sola, principalmente por la migración. Solo tiene dos calles principales que la mayor parte del tiempo se encuentran desiertas, como si fuera un pueblo fantasma.
“Tiene, aproximadamente de 120 habitantes/ Zimapan presenta alrededor de 160 localidades de las cuales 147 están en esta condición de menos de 500 habitantes estamos hablando de un 35, 40% del total de su población radica es estas localidades”.
La falta de servicios y oportunidades son las principales causas por las que esta comunidad ha quedado en el olvido.
Mucha gente está como maestros, ingenieros, arquitectos, doctores, entonces todos tienen que salir, familias completas, ¿por qué? porque pues el área escolar, el área que ellos deciden seguir estudiando no la hay por acá ni el trabajo tampoco”.
En un pueblo donde antes el comercio era la principal actividad, actualmente sus tiendas lucen casi vacías y abren a menos que alguien necesite un producto.
“Hay 2, 3 casas que tienen un aproximado de unos 60 años cerradas”.
De acuerdo con datos del Consejo Estatal de Población en Hidalgo, hay 4 mil 714 localidades y de ellas 3 mil 788 son poblaciones de menos de 500 habitantes, algunas incluso solo tienen uno o dos habitantes.