Merkel en Moscú: ¿Reajuste de la política exterior?

 

En entrevista concedida a una revista rusa de internet, el influyente kremlininólogo Alexander Rahr calificó la visita a Moscú de la Primer ministro de Alemania, Angela Merkel -primera visita al Kremlin luego de cinco años- de “casi un avance decisivo”. Afirmó que lo que estamos apreciando ahora es el alejamiento de la política exterior puramente “orientada al valor” para dirigirse a una “política de intereses”, y que la canciller Merkel y el Presidente de Francia, Emmanuel Macron, han entendido que los “problemas del Medio Oriente no se pueden resolver sin Rusia” (esto se refiere a Irán, Siria y Libia).

Por su parte, el ex presidente de la Conferencia de Seguridad de Múnich, el profesor Teltschik, en un comentario para la revista Focus Magazin conminó a una estrecha coordinación entre Rusia y los jefes de Estado de Alemania, Francia y Gran Bretaña, con el objetivo de alcanzar un acuerdo pacífico con Irán. Argumenta, en esencia, a favor del plan de paz del presidente iraní para el golfo Pérsico, presentado a las Naciones Unidas en septiembre de 2019, el cual pide que las tropas extranjeras se mantengan fuera del golfo, así como crear la “arquitectura de seguridad”.

El reciente y brutal ataque con drones ordenado por el Presidente de Estados Unidos, Donald Trump, en el que fue asesinado el segundo hombre del mando iraní, el general Soleimaní, seguido de un ataque infructuoso en Yemen y de la decisión de Trump de imponer “sanciones extraterritoriales” contra las compañías europeas de energía que participan en la construcción del gasoducto Nord Stream 2, en mi opinión, “se ha convertido en la proverbial paja que le rompió la espalda al camello.” El comportamiento de Trump no sólo ha demostrado el abierto desprecio por el derecho internacional, sino que es también la declaración de la bancarrota de la política estadounidense para el Medio Oriente que por 20 años se involucró en guerras para dejar a la región entera sumida en el caos.

 

El fortalecimiento del bilateralismo en las relaciones Rusia- Alemania

Lo que se vislumbra es una nueva dimensión diplomática de cómo abordar los conflictos actuales (Irán, Siria, Libia y Ucrania). Esto se reflejó en la reciente visita de la canciller Merkel a Moscú, en la que se reunió el 12 de enero con el presidente Putin. Fue la segunda reunión entre Putin y Merkel luego de la cumbre de Normandía de París, el 9 de diciembre, la cual fue parcialmente “exitosa”, aunque no haya alcanzado el cese al fuego en Donbass.

En una conferencia de prensa en el Kremlin, Putin y Merkel calificaron la reunión que sostuvieron de “ sustancial y útil” abarcando los campos político, humanitario y cultural, así como el análisis de los problemas internacionales. “Rusia está comprometida a construir la cooperación con la República Federal Alemana sobre los principios del respeto, la equidad, el beneficio mutuo y la consideración de los intereses del otro,” declaró el presidente Putin.

Ambos gobernantes pusieron atención a los esfuerzos que se están haciendo para “restaurar la estabilidad y la seguridad en Libia,” la cual pudiera tener “consecuencias para Europa en términos de migración ilegal, contrabando y tráfico de armas y de drogas,” dijo Putin, y señalaron la necesidad de poner fin a la confrontación entre el Ejército Nacional Libio del general Haftar y el gobierno del Acuerdo Nacional de Fayez al-Sarraj, a fin de establecer una tregua y dar los pasos para reiniciar el proceso político para acabar con la división del país y formar las instituciones estatales.

El presidente Putin insistió con vehemencia que Rusia considera “oportuna” la iniciativa alemana de realizar una conferencia internacional sobre Libia en Berlín el 19 de enero. Dicha conferencia sería necesaria para asegurar la participación de los estados que están realmente interesados en ayudar al acuerdo libio y el asunto clave es que sus decisiones deben ser acordadas previamente con las partes libias. GhassanSalamé, representante especial del Secretario general de Naciones Unidas tendría un papel importante en esto.

Este fue también un tópico clave de la declaración de Merkel en la conferencia de prensa. Ella subrayó que después de la constructiva reunión de Erdogan y Putin de Estambul del 8 de enero se iniciaron los esfuerzos para la tregua y anunció la invitación a todos los participantes a la reunión del 19 de enero en Berlín, la que se realizará bajo los auspicios de Naciones Unidas (el Secretario general de Naciones Unidas, Antonio Guterres y el representante especial del organismo para Libia, Ghassam Salamé). “No vamos a interferir con la soberanía libia, dijo Merkel, y por lo tanto las partes en conflicto, Fayez al-Sarraj y Jalifa Haftar, habrán de participar en este proceso. Tenemos la esperanza de que los esfuerzos emprendidos por Rusia y Turquía sean exitosos. En breve enviaremos nuestra invitación a la conferencia de Berlín.”

Desde septiembre, Alemania está participando en un mecanismo de consulta que acompaña el trabajo del Secretario general de Naciones Unidas y de Ghassan Salamé para restaurar la estabilidad de Libia.

 

La estabilización de Siria

El segundo mayor conflicto de la zona es Siria. El presidente Putin y la canciller Merkel recalcaron los resultados de su reunión con el presidente Assad, en su reciente visita a Damasco el 7 de enero y la celebración de la Navidad ortodoxa rusa al lado del Patriarca de Antioquía y de todo el Oriente en la Catedral de María de Damasco. Cabe destacar que esta es la primera visita del presidente ruso a Damasco desde el estallido de la guerra. Esta visita fue seguida de la visita del 8 de enero a Estambul, donde en presencia del Presidente de Turquía, Rezep Erdogan, se inauguró el gasoducto TurkishStream de 930 kilómetros que lleva gas natural de Rusia al Suroeste de Europa.

La canciller Merkel expresó satisfacción por la reunión de los presidentes Erdogan y Putin del 8 de enero que condujo a “importantes resultados.” Recalcó que le satisfacía plenamente que Erdogan y Putin alcanzaran un acuerdo respecto a dos corredores humanitarios en Siria.

 

El JCPOA con Irán debe respetarse

El otro tópico de las conversaciones de Merkel y Putin se centró en conservar el Plan Conjunto de Acción, el acuerdo nuclear con Irán. Tanto Putin como Merkel subrayaron que “Rusia y Alemania están resueltos a continuar con la aplicación del JCPOA y que los iraníes habrán de recibir el apoyo de las naciones europeas que prometieron establecer un conducto financiero especial separado de dólar para usarse en acuerdos comerciales con Irán. El instrumento en Apoyo de Intercambios Comerciales (INSTEX) comenzará a trabajar finalmente.

Respecto a Ucrania, Merkel y Putin hicieron hincapié en que comparten la opinión de que no hay otra opción que no sea los acuerdos de Minsk para normalizar la situación del Sudeste de Ucrania. “Esperamos que el lado ucraniano inicie la aplicación de los acuerdos en el terreno político. Que se extienda la ley sobre la condición jurídica especial de Donbass es un movimiento bueno en la dirección correcta. Sin embargo, la ley no debe tener un tiempo límite, como está estipulado en el acuerdo de Minsk. La condición jurídica especial de Donbass se tiene que establecer en la Constitución ucraniana como está marcado en los acuerdos de Minsk,” declaró Putin.

Sobre el gasoducto Nord Stream 2 que une a Rusia y Alemania, ambos líderes señalaron su determinación de continuar con la obra, la cual, dijo Putin, será terminada por Rusia, aunque significa un breve retraso. Los dos mandatarios declararon que las sanciones extraterritoriales impuestas por Estados Unidos no les impedirán terminar la obra, que es un interés de Europa y de Rusia.

*MSIa Informa

Noticias relacionadas