La organización México Evalúa alertó que el Gobierno federal asignó en forma discrecional a los gobiernos estatales casi 300 mil millones de pesos extraordinarios durante los primeros cinco años de la administración de Enrique Peña Nieto, lo que implica un riesgo de control político sobre las entidades federativas y debilita a la Cámara de Diputados en su facultad de aprobar cada año el Presupuesto de Egresos.
Estudios de este organismo indican que en tres programas, el Ramo 23, Provisiones Salariales y Económicas se concentró la asignación extraordinaria a las entidades, sin criterios para determinar montos, sin reglas de operación y sin control alguno por parte de la Cámara baja pese a los montos multimillonarios asignados.
RAMO 23, CAJA GRANDE DEL GOBIERNO FEDERAL
“Por la forma en que se maneja el Ramo 23, podemos decir que no se trata de la caja chica, sino la caja grande del Gobierno federal, con montos que son superiores a programas educativos o de salud”, afirmó Mariana Campos, coordinadora del Programa de Presupuesto y Rendición de Cuentas de México Evalúa.
Reporta el diario Reforma que el programa de Contingencias Económicas es el antecesor del Fondo para el Fortalecimiento Financiero, el mismo del que el Gobierno de Chihuahua, que encabeza Javier Corral, reclamó 700 millones de pesos a la Secretaría de Hacienda para el ejercicio de 2017 y que aún no se le entregan.