México y Estados Unidos acordaron “sellar sus fronteras, cada país desde sus responsabilidades y en un ámbito soberano”, implementar acciones conjuntas y reforzar los esfuerzos de inteligencia para frenar el tráfico de armas.
En el encuentro participaron los secretarios de Seguridad, Alfonso Durazo Montaño; de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard Casaubón; de la Defensa, Luis Cresencio Sandoval González; de Marina, José Rafael Ojeda Durán y el embajador de Estados Unidos en México, Christopher Landau.
La Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana informó que ambos países revisaron la estrategia para detener el flujo de armas, como parte del Subgrupo Binacional sobre Tráfico de Armas.
Durante la reunión, las autoridades mexicanas informaron sobre la situación actual en la zona fronteriza y los esquemas de coordinación e intercambio de información para atender el flujo de armas en las aduanas terrestres, marítimas y aéreas.
PLANES DE ACCIÓN CONJUNTOS
En tanto, las autoridades estadounidenses comprometieron el esfuerzo de su gobierno para enfrentar de manera firme el tráfico de armas que opera de manera trasnacional y reiteraron su disposición de trabajar en planes de acción conjuntos y maximizar la eficacia de los esfuerzos a través de la inteligencia.
Las delegaciones acordaron tener reuniones ejecutivas cada 15 días y desburocratizar las respuestas institucionales.
La embajada de los Estados Unidos, por su parte, emitió un comunicado en el que refiere que en el marco de la entrada en funciones del operativo Frozen, Landau subrayó que hay voluntad política para enfrentar el reto compartido de la inseguridad en México.
“Ambos lados acordaron moverse rápidamente para compartir información y entregar resultados concretos en este esfuerzo. El compromiso establecido por y fortalecerá las capacidades para atender y reducir uno de los elementos detonadores de la violencia”, señaló la embajada.