Olivia Retter de Ware, una menor originaria de Inglaterra, adquirió una carcasa de iPhone -a bajo costo-, la cual contenía líquido y brillo tóxicos.
Un día, la niña de nueve años se quedó dormida sobre el equipo y despertó más tarde, al sentir ardor y dolor en la pierna. Una grieta en el accesorio, permitió que saliera un misterioso líquido elaborado con químicos extremadamente peligrosos, los cuales podrían dejarla con una cicatriz en forma de iPhone para toda su vida.
Su madre Carly Ritter, publicó un mensaje de advertencia: “Por favor, compartan lo más que puedan que esta carcasa está llena de ácido y si se rompe, puede causar quemaduras de segundo y tercer grado. Este es el daño que le hizo a mi hija y ella tendrá una cicatriz de por vida. Muchas chicas tienen estas, entonces tengan cuidado”.
Retter, señaló al periódico Daily Mail que trató de contactar a la tienda que les vendió el producto, llamada New Look, sin embargo, no han obtenido respuesta.
“No tenía ninguna advertencia. Nada que dijera que lo que hay adentro es un químico que puede causar quemaduras graves. Imagina si se hubiera roto cuando Olivia tuviera el teléfono en la cara, pudo haber ido a sus ojos. Uno no piensa que este tipo de cosas puedan pasar. Muchas chicas tienen carcasas similares y no tienen idea de lo peligrosas que son”, indicó.
Por su parte, un vocero de New Look, declaró al diario que dicho producto fue retirado de sus tiendas y que ya investigan lo ocurrido.