Marco Antonio Escobedo
Cada vez son más frecuentes los casos de zoofilia, también llamado bestialismo en el mundo. Lo terrorífico del caso que narraremos en esta ocasión está involucrado un menor de edad.
Circula mediante las redes sociales la historia de Morita, una perra que, tras ser abusada sexualmente por su dueño, fue rescatada por la Policía y el Instituto de Protección Animal.
Los hechos se registraron en Bogotá, Colombia, donde la mascota familiar sufría de abuso sexual por parte de su propietario, un niño que tenía el permiso de sus padres para efectuar tan aberrantes actos.
PRACTICA “NORMAL”
A decir de los padre, ellos permitían que su hijo practicara la zoofilia con Morita, ya que es considerada una práctica normal en la zona donde habitan.
La perrita “se mostraba agresiva y, al mismo tiempo, temerosa con los hombres”, comentó uno de los encargados de la liberación del can.