La Organización para la Cooperación y Desarrollo Económicos (OCDE) mejoró las expectativas de crecimiento para México a 2.5 por ciento este año y a 2.8 por ciento en el 2019. Esta modificación prevé un aumento de 0.3 y 0.5 por ciento ante el diagnóstico previo, realizado en noviembre del 2017.
Según el reporte, presentado por el secretario general Ángel Gurria, la mejora del consumo privado y las exportaciones respaldarán un crecimiento estable en México, parte del argumento por el cual se proyectan los números superiores a los de noviembre del año anterior.
Con respecto a las preocupaciones de la inversión privada ante la incertidumbre, la organización comentó que un buen resultado en las negociaciones del Tratado de Libre Comercio (TLCAN) con Estados Unidos y Canadá podría estimularlas.
El informe destaca que los niveles de desempleo se mantienen en niveles históricamente bajos, con una consolidación de la fuerza de trabajo formal que no se ha traducido en la aparición de presiones salariales.
El organismo se dio a la tarea de plantear que la inversión pública seguirá siendo tenue mientras la inflación pasa de su nivel más alto a los objetivos fijados del Banco de México, con un 4.4% previsto este año y un 3.4% el siguiente.
Con respecto a las amenazas al crecimiento económico de México, el organismo aseguró que las turbulencias de los mercados financieros asociadas a la expectativa de cambios en la política monetaria de Estados Unidos o a una incertidumbre sobre un ambiente de negocios podrían conducir a la volatilidad cambiaria, endurecimiento de las condiciones financieras y una salida de capitales.