El Consejo de Derechos Humanos de la ONU aprobó la primera resolución de su historia sobre Venezuela, en la que insta al gobierno de Nicolás Maduro a aceptar ayuda humanitaria internacional para paliar la escasez de alimentos y medicinas que afecta a la población.
En un gesto político firme hacia Maduro, 23 países votaron a favor de la resolución, siete en contra y 17 se abstuvieron.
El embajador venezolano ante la ONU en Ginebra, Jorge Valero, condenó la resolución y la consideró “el comienzo de una escalada intervencionista” para conseguir la caída del gobierno y “establecer un mecanismo de tutela” foráneo sobre Venezuela.
INSTRUMENTOS DE EU
Valero acusó a los países que promovieron la resolución de ser instrumentos de Estados Unidos e Israel en contra de su país.
En nombre de una decena de países latinoamericanos patrocinadores del texto, el embajador de Perú, Claudio de la Puente, dijo que había llegado el momento de que el Consejo atienda a una situación que ha provocado el éxodo de unos dos millones de venezolanos que han buscado acogida en otros países de la región.
Aseguró que el propósito de esta iniciativa era “dar voz a millones de venezolanos que padecen una crisis humanitaria” y que de ninguna manera tenía un ánimo de injerencia.
RIESGO DE EPIDEMIAS
La resolución aprobada recuerda que la falta de alimentos, fármacos y suministros médicos han dado lugar a “un aumento de la malnutrición”.
Además, alerta del riesgo del brote de enfermedades que habían quedado erradicadas o bajo control en Sudamérica.
El Gobierno venezolano ha rechazado una y otra vez cualquier tipo de ayuda humanitaria, en particular de países occidentales, por considerar que esto podría ser utilizado como pretexto para una intervención militar exterior.