La OTAN tildó hoy de “inaceptable y contraproducente” el discurso del presidente de Rusia, Vladímir Putin, en el que presentó armamento nuclear como el misil balístico Sarmat, con “alcance prácticamente ilimitado”, dijo, y que vuelve “inútil” el escudo antimisiles de Estados Unidos.
Remembró que la OTAN es una alianza defensiva que “está preparada para defender a todos sus miembros contra cualquier amenaza”, si bien subrayó que no busca una nueva Guerra Fría o una nueva carrera armamentística.
“Todos los aliados apoyan los acuerdos de control de armas que generan confianza, en beneficio de todos. Seguimos trabajando a favor de una mayor predictibilidad y transparencia militar”, añadió.
En cualquier caso, aseguró que, en respuesta a las acciones “agresivas” de Rusia en Ucrania y su continua escalada militar desde el mar de Barents hasta el Mediterráneo, la OTAN ha optado por “un enfoque de doble vía” con “una disuasión y defensa potentes combinadas con un diálogo significativo”.
“Estamos comprometidos a obtener resultados en ambas áreas”, recalcó.
Este jueves, Putin se dio a la tarea de avisar a Estados Unidos de una nueva guerra de las galaxias, al presentar un armamento nuclear “sin parangón” que puede alcanzar cualquier punto del globo.
“Antes de que tuviéramos los nuevos sistemas de armamento, nadie nos escuchaba. ¡Escúchenos ahora!”, indicó Putin durante un encendido discurso sobre el estado de la nación ante ambas cámaras del Parlamento.
En una intervención que recordó a los momentos más álgidos de la Guerra Fría, Putin dedicó casi una hora a presentar al mundo el nuevo arsenal estratégico ruso: desde misiles intercontinentales a cohetes hipersónicos y armas con rayos láser.
“Insisto, ningún país en el mundo tiene, hoy, las armas que tenemos nosotros. Fin de la cita”, resaltó, para indicar que a partir de ahora “el sistema antimisiles estadounidense será inútil y no tendrá ningún sentido”.
