El curioso caso tuvo como escenario la ciudad de Barraquilla, en Colombia.
Jeimy, la protagonista de esta historia, fue cachada siéndole infiel a su esposo, un vendedor de producto del hogar el cual trabajaba fuertemente para darle todo a su mujer. Parecería algo ‘normal’ aquello de la infidelidad, puesto que en muchos matrimonios suceden este tipo de cosas, pero la forma en cómo se descubrió todo resultó siendo para ‘alquilar balcón’.
Un día de fin de semana Jeimy pplaneó verse con su amante, Jesús Barrios, un comerciante dueño de una cacharrería con el que llevaba una relación a escondidas desde hacía 1 año sin que su esposo lo hubiese notado.
La excusa perfecta de la mujer para que su marido no sospechara a donde se iría realmente fue ir a acompañar a su mamá a su casa que estaba enferma. Jeimy sabía que su mamá no quería ver ni en pintura a Luis y por esta razón él no se iba a presentar en el lugar.
Cual lo acordado, la pareja de infieles se puso cita a las 8:00 pm en el norte de Barraqnuilla.
La pareja que estaba disfrutando de unas copas en un bar de esos que llaman ‘caletos’ del norte de la ciudad, lejos del lugar de residencia de Jeimy, luego de la ‘bailada aquella’ y del calor de la noche, se dispuso a tener algo más de intimidad y acordaron trasladarse a un motel ubicado en la vía Juan Mina.
Como Jesús no tenía carro, llamó a una línea de servicio de taxis para que los transportara hasta el lugar.
Pasados 10 minutos luego de realizar la llamada, su amante algo tomada, lo apresuró porque se estaba demorando mucho el servicio y tenía miedo de que alguien la viera ‘mal parqueada’.
“Amor pide un UBER que ese taxi se está demorando y ya estoy más prendía que farolito un 7 de Diciembre y estoy dando mucha boleta aquí”.
El hombre le hizo caso a su moza y llamó al call center a cancelar el servicio del ‘zapatico’ y de inmediato pidió un UBER.
“Amor pero mira quién es el conductor porque cuidado nos va a conocer a los dos”, le advirtió la mujer a su amante.
‘Chucho’ como lo llamaba Jeimy revisó su aplicación y verificó los datos del conductor: Jaime Contreras conduce un Ford Fiesta Blanco y en la foto llevaba puesto un jersey amarillo, un completo desconocido para la pareja.
Con lo que no contaba la pareja era que Luis (el esposo de Jeimy) esa misma noche le había dicho a su mejor amigo que tenía un Ford Fiesta, que le hiciera la ‘segunda’ para rebuscársela manejando ya que no tenía plata para terminar el mes. El individuo que le prestó el automóvil era Jaime Contreras conocido en el barrio como ‘El imán’ ya que según sus amigos y vecinos todo lo atrae.
Y vaya que sí, puesto que se avecinaba un encuentro entre Chucho, Jeimy y Leo producto de su trabajo como conductor de la famosa aplicación.
El momento se dio cuando el carro llegó a la ubicación exacta, la pareja abordó el carro por la parte trasera y es ahí cuando Luis se da cuenta del destino del viaje y mira por el retrovisor a su esposa.
“Que es esto carajos…”, dijo exaltado el conductor. “No no es lo que estás pensando”, dijo la mujer con la voz entrecortada. La pareja abrió las puertas del carro y rápidamente se dio a la huida. Pero no los halló.
Luis abandonó su esposa y muy seguramente Chucho y Jeimy continúan con su romance. Fuente: Aweita.larepublica.pe