En numerosos municipios chiapanecos, el uso desmedido de los pesticidas ha desatado una serie de enfermedades tanto respiratorias y estomacales, como casos de leucemia y hasta deformaciones congénitas.
Estos efectos han sido las consecuencias a largo plazo de la utilización de químicos que por aire y tierra fueron rociados durante décadas para el tratamiento de plagas e infecciones en sembradíos de caña, palma de aceite, plátano, soya, ajonjolí, mango, maíz, entre otros.
PLAGUICIDAS PROHIBIDOS
Al respecto, José Esaú Guzmán Morales, jefe de la Jurisdicción Sanitaria 7 en la región Costa-Soconusco de Chiapas dio a conocer que tan solo en 2016 se suscitaron 20 muertes en el radio correspondiente a los municipios de Suchiate, Arriaga, Motozintla y Tapachula.
El titular de salud en la frontera sur manifestó que estos plaguicidas están prohibidos y se aplican sanciones para aquellos que sean responsables del uso de los mismos, pero que desgraciadamente se hace un uso clandestino de los mismos.