El número de muertos en las protestas contra la administración de Daniel Ortega en Nicaragua creció a 43, mientras se confirma que existe desplazamiento forzado entre los jóvenes, informó antier el Centro Nicaragüense de Derechos Humanos (Cenidh).
“Tenemos confirmados 43 fallecidos, y dos por constatar”, dijo una integrante del Cenidh, Meyling Sierra. “Hay desplazamiento forzado, sobre todo de los jóvenes que participaron en la manifestación, ellos tienen temor a represalias, ni siquiera se atreven a poner una denuncia”, afirmó.
Sierra se dio a la tarea e sostener que incluso las mismas familias de los jóvenes los han obligado a ocultarse lejos de sus casas. A su vez, estudiantes universitarios exigieron la creación de una comisión independiente para investigar la represión de las protestas antigubernamentales, como condición para iniciar un diálogo que desemboque en la democratización del país. “Esta comisión deberá investigar, condenar y sancionar a todos los responsables intelectuales y materiales de los crímenes de lesa humanidad cometidos en el marco de la represión”, señalaron los estudiantes en una declaración pública.
El pasado viernes, la organización Human Rights Watch (HRW) instó a la Organización de los Estados Americanos (OEA) a convocar de urgencia a su Consejo Permanente para presionar el gobierno nicaragüense a que permita que las investigaciones las realice la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).
Además, la marcha convocada por la Iglesia católica, “Por Amor a Nicaragua”, comenzó con la participación de miles de personas en las calles de Managua.
Asimismo, miles de campesinos a bordo de camiones, autobuses y furgonetas llegaron para participar en este movimiento pacífico.