Víctor Manuel Rojano
Hildegardo Francisco Guerra Martínez llegaba con el porte de toda una celebridad. Así, tal como lo era Rogelio Guerra, (Aguascalientes, 8 de octubre de 1936).
Los penetrantes ojos claros del actor mexicano de cine, teatro, televisión y doblaje se paseaban contemplando los diferentes colores de los “Crown Victoria” y “Fairmont Élite ll”, mientras lucía su elegante caminar portando un traje gris claro de “High Life” por la sala de exhibición y ventas de la Ford NASA, Lomas de Sotelo.
¿Dónde está el Señor Rojano?, preguntaba con su voz varonil Rogelio Guerra mientras el contador Víctor Manuel Rojano y Bravo, Gerente de Refacciones de Ford NASA Lomas, bajaba unas pequeñas escaleras para recibirlo con un sincero y gran abrazo y enseguida mostrarle al actor el elegante auto que durante un año conduciría.
LOS RICOS TAMBIÉN LLORAN
Rogelio Guerra inició su carrera durante la década de 1960. Fue el arquetipo del héroe del llamado Enchilada Western, es decir películas ambientadas en la estética y temática del Oeste Estadounidense o western, pero con actores mexicanos y en español, aprovechando los estudios y escenarios de las películas estadounidenses filmadas en México. También se dedicó al modelaje.
La anécdota que ahora relato me la contó durante más de una ocasión mi padre; era cuando agonizaban los años 70’s y la carrera de Guerra iba en franco ascenso con Los Ricos también lloran. Una telenovela icónica no sólo de Televisa sino de toda la televisión mexicana, junto a la ojiverde, Verónica Castro.
Rogelio era muy querido en la agencia, por su carisma, porte, pero sobre todo por su gran sencillez y respeto con el que trataba al personal.
Era entonces el momento de la entrega de su Ford al actor de moda. El personal de la agencia automovilística lo rodeaba y le aplaudían al entregarle las llaves. Entonces él tomaba el micrófono para felicitar a todo el equipo. No sólo por su profesionalismo -les decía-, sino por las enormes muestras de aprecio hacia él, don Rogelio Guerra, el mismo que hoy está conquistando el cielo,
