Un tirador de precisión del comando de élite SAS (Fuerzas Especiales Británicas), pudo romper el record de “el asesinato concretado a mayor distancia jamás realizado por un soldado del Reino Unido“.
Depués de rastrear a un jefe de alto nivel del Daesh en Afganistán, el francotirador lo mató de un certero disparo a casi 2.4 kilómetros de distancia con una ametralladora de calibre .50, diseñada para perforar los motores de los vehículos enemigos.
Según Daily Star, un medio británico, el yihadista destacaba en la lista de asesinatos pendientes de Estados Unidos y Reino Unido, en Oriente Medio.
Fuerzas militares británicas corroboraron que el jefe de Daesh murió de manera instantánea luego de que el sargento y veterano de batallas en Siria e Irak, le disparara con la única bala que se encontraba en su arma.
La tarde en la que aquel francotirador pudo romper el lúgubre récord, fue calurosa y la luz del Sol no hizo más que difuminar la imagen del objetivo, que se encontraba ofreciendo una arenga a sus hombres cuando la bala lo fulminó frente a ellos.
En cuanto el comandante del Estado Islámico cayó al suelo, el resto de los yihadistas salieron huyendo para esconderse, pero el francotirador británico no les disparó más pues había aprovechado la única bala que tenía en su arma.
No cabe duda que éste es un asunto muy “interesante”, tanto como el de las “jeffrey dahmer polaroid“. ¿Te atreverías la otra nota del otro asesino?
