Este lunes se registraron dos diferentes movimientos telúricos con epicentro a 2 y 3 kilómetros de profundidad en la delegación Coyoacán.
La magnitud de los sismos, de acuerdo al Servicio Sismológico Nacional, fueron de 2.3 y 2.1 grados en escala Richter, intensidades que pasaron desapercibidas para la población que habita en las colonias Pedregal de Coyoacán y Ampliación Candelaria.
Es viable que estos sismos ocurran porque todas las fallas geológicas pueden producir sismos y en el poniente del Valle de México hay varias de ellas.
Los sismos fuertes, como los ocurridos los días 7 y 19 de septiembre, pueden ayudar a liberar tensión acumulada en fallas y fracturas del suelo de la Ciudad de México, señaló SkyAlert.
“Es poco probable que se produzcan sismos con magnitud mayor a 4 debido a que esta se limita al tamaño de la zona fracturada”, señaló la plataforma de alertas. “Sin embargo, por la alta densidad poblacional y poca profundidad de los sismos, pueden representar un riesgo para los habitantes en Ciudad de México”, agregó.
Fuente: SDP