Sin control, plaga de ratas en Nueva York

 

Las ratas en Nueva York se han convertido en un problema de salud pública que día tras día aumenta y las autoridades poco pueden hacer para combatirla.

 

Los precios de las viviendas obligan a los vecinos a abandonar la ciudad y pareciera que su espacio está siendo ocupado por roedores que se han acostumbrado a vivir en el frenético ritmo de la gran manzana, de la cual se han adueñado.

 

Según datos del servicio de asistencia telefónica de Nueva York, los reportes de madrigueras de ratas en la ciudad aumentaron 40 por ciento en tan sólo un año; en los últimos 12 meses, se reportaron 17 mil 350 llamadas para alertar sobre la presencia de roedores.

 

En 2017, cuando ya se registraba un aumento puntual en la población de ratas en Nueva York, el alcalde Bill de Blasio anunció una serie de medidas para combatir a los roedores.

 

PARA LA BATALLA CONTRA LOS ROEDORES

Se destinó un presupuesto de 32 millones de dólares, dinero con el cual se aumentó la frecuencia de recolección de basura y en lugares públicos se instalaron botes de acero que compactan los desperdicios para no dar oportunidad de que se conviertan en alimento y guarida de animales.

 

También se creó una brigada especial que se dedica exclusivamente al exterminio de las ratas, la cual a últimas fechas ha utilizado hielo seco para colocarlo dentro de las madrigueras cuando los roedores están dentro.

 

Los ciudadanos, por su parte, han aprendido que el veneno y las trampas dejaron de ser suficientes y ahora usan palas para destrozar las madrigueras, procurando que la colonia de ratas siga dentro de ellas.

 

PLAGA VA EN AUMENTO

La única precaución que toman es la de poner cinta adhesiva en los huecos de sus pantalones para evitar que los animales huyan y se metan en la ropa. Pero la plaga de ratas sigue en aumento.

 

De acuerdo con expertos, el aumento en la construcción es uno de los factores que ha aumentado la plaga de ratas; cada que escarban un nuevo terreno, provocan que los roedores se separen y se establezcan en nuevos lugares.

 

Lo mismo ocurre cuando se demuelen casas y edificios viejos, en los que las ratas ya se encontraban establecidas y, al quedarse sin madriguera, buscan nuevos lugares para habitar. Todo esto dentro de una isla, la cual ofrece una extensa red de metro subterráneo que sirve como vía de transporte para los animales. 

Noticias relacionadas

Comenta