Actualmente, para la salud pública, la soledad y el aislamiento social representan un mayor peligro que la obesidad, de acuerdo con la Asociación Americana de Psicología.
El psicólogo social de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), Óscar Alberto Clavellina, dijo: “Las grandes ciudades concentran mucha gente, mucho capital, mucho deseo indudablemente y mucha individualidad. La gente está sola. Puede haber aglomeraciones de mil personas en el metro, pero esas mil personas van solas, van individualizadas, van ensimismadas”.
Según especialistas, el aislamiento está vinculado directamente a una enajenación con las nuevas formas de comunicación virtuales que generan la sensación de una conexión, a medias.
El subdirector de Hospitalización del ‘Hospital Psiquiátrico Fray Bernardino Álvarez’, Horacio Reza, señaló: “A nivel mundial, se habla de la soledad que es la epidemia actual y yo creo que tiene que ver mucho todo lo que son las redes sociales, donde aparentemente estás vinculado con muchas personas, pero realmente no estás cara a cara”.
Psiquíatras y psicólogos sociales coinciden en que resulta vital para el ser humano tener contacto físico y hablar en persona.
“Cada vez nos comunicamos menos, cada vez nos vemos menos a los ojos, platicamos menos, expresamos menos sentimientos y los llenamos a través de un montón de intermediarios como son las redes sociales virtuales, como son aparatos electrónicos”, destacó Óscar Alberto Clavellina, psicólogo social de la UNAM.
La soledad se puede dar a cualquier edad, pero es más común en adultos mayores por la salida del mercado laboral, limitaciones físicas cada vez más frecuentes y por muerte de personas allegadas.
La investigadora del Instituto Nacional de Geriatría, Liliana Giraldo, dijo: “Aquí es donde se dan las principales pérdidas por viudez, o sea pérdida de la pareja, pérdida de los compañeros”.
A pesar de que los roles sociales de la mujer, como el ser madre o abuela, le ayudan a aminorar la sensación de soledad, cuentan con una desventaja, al quedar viudas difícilmente vuelven a vivir en pareja.
De acuerdo con cifras del Instituto Nacional de las Personas Adultas Mayores, en México por cada viudo hay tres viudas.
“Los hombres cuando quedan viudos, tienden a tener otra relación, a tener segundas nupcias, lo que hace que de alguna forma con su pareja mantengan una red social”, señaló Liliana Giraldo, investigadora del Instituto Nacional de Geriatría.
Los especialistas aseguran que en México hay una medida clave de contención: la familia y su dinámica. Sin embargo, el mexicano, como parte de un mundo globalizado, no escapa del todo y puede llegar abstraerse.
La soledad se encuentra asociada a padecimientos como depresión, ansiedad y eventos cardiovasculares por eso se recomienda tener contacto con los seres queridos y externar sentimientos viéndose cara a cara.
Con información de Televisa
