Generalmente, las mujeres nos distinguimos por elegir a quien menos nos conviene y terminamos enamoradas de hombres malos, mujeriegos o casados. Sería ideal alejarse de ellos, pero si resulta imposible, debes considerar algunas recomendaciones.
Hazte desear
Debes saber que para un mujeriego, cada mujer es un reto y no precisamente una persona que le interese sexual o sentimentalmente; le fascina que estén tras él y sentirse poderoso. Por ello, la mejor opción es no hacerle caso de vez en cuando, ni creer todos sus halagos.
Mientras menos esperanzas le des, más intentará salir contigo, lo cual puede transformase en un interés real.
Marca la diferencia
No preguntes por otras mujeres, muéstrate desinteresada. Al marcar la diferencia, desarrollará un interés profundo en ti.
Procura no estar siempre a su disposición, eso lo aburrirá y alejará. Sal con otros hombres, aún si no es algo serio o se trata de una amistad. Saber que tienes otras citas, te hará deseable y no querrá perderte.
Controla tu deseo sexual
No admitas tener intimidad con él. Dile que no accederás hasta que haya un compromiso más grande entre ustedes; no lo hagas como una amenaza, debe ser una preferencia que te permita conseguirlo y salir menos lastimada si la relación no prospera.
Sin duda, la clave está en ser un poco misteriosa y no mostrar tu amor total, a fin de que crezca su empeño por conquistarte, aunque ya estés enamorada.
