¿Qué nos deparará hacia 2030? Expertos en el sector nos hablan de las tecnologías que serán tendencia en los siguientes diez años y que se volverán tan comunes como un celular en la mano.
Hola, 5G
El alcance de internet todavía tiene una deuda pendiente con diversas zonas geográficas del mundo; sin embargo, algunas otras, como China y Estados Unidos, han acelerado el paso para tener a su disposición una red tan rápida que opaca a la 4G y a las 4.5G.
La red 5G parece que aún tardará varios años en llegar a México, aunque ya se han hecho pequeños adelantos. Alexander Rojas, director de desarrollo de negocios en MediaTek México, prevé que, así como tardó el establecimiento de la 4G en México, la red 5G estará en pleno apogeo en los dispositivos después de 2025.
¿Y cuánto más veloz será esta red? «Con la gigared (4.5G), podemos alcanzar una velocidad de 1 giga; con el 5G estaremos alcanzando un mínimo de 5 gigas», explicó Rojas en entrevista con El Financiero.
La 5G también permitirá la carga de datos de forma tan veloz que impulsará el cómputo cuántico, de acuerdo con el doctor J. Enrique Portillo, profesor de Transformación Digital del Departamento de Mercadotecnia y Análisis de la Escuela de Negocios del Tecnológico de Monterrey.
“Hoy la generación de datos está requiriendo niveles de ‘cómputo cuántico’. Hoy hablamos de la transmisión de ‘petabytes’, como en el caso de la imagen generada de manera compuesta del primer agujero negro ‘observado’. Datos que no se pudieron transmitir por internet por su volumen y que tuvieron que ser enviados por avión para reunirlos y generar ‘la foto’. La carrera que hoy sostienen EU y China por la tecnología 5G hará que todo este tema quede en el pasado y si a eso le sumamos la tecnología del cómputo cuántico, el potencial de innovación será exponencial”, dijo Portillo en entrevista con El Financiero.
‘Mira, mamá, sin manos’
¿Un vehículo sin conductor? Otro de los ‘sueños’ de la ciencia ficción… hasta que despertamos de golpe. Empresas insignia en el campo de los ‘vehículos del futuro’, como Tesla de Elon Musk, han trabajado por años para tener no solo automóviles eléctricos, sino unos que ya no dependan de personas tras el volante.
Los vehículos autónomos todavía no generan la confianza suficiente debido a diversos accidentes en los que se han involucrado y donde incluso ha habido muertos.
A pesar de los fallos, Tesla le sigue apostando a los autónomos, tanto así que hace unas semanas lanzó su más reciente vehículo: la Cybertruck.
‘El futuro: conectando vidas’, tercera parte del estudio ‘Realizing 2030’ de Dell Technologies, presenta un panorama en donde los automóviles autónomos cada vez son más constantes y, además, forman parte de ciudades conectadas, las cuales, según las previsiones en el estudio, generarán ya desde 2020 alrededor de 200 millones de gigabytes de datos diariamente.
Inteligencia artificial más allá de una cámara
Has escuchado este término, ¿cierto? Es más, hasta lo has utilizado una y otra vez. Hay una probabilidad alta de que tu smartphone esté entre los que tengan cámara fotográfica mejorada con inteligencia artificial (IA).
La siguiente década luce como el de la ‘explosión’ de un conjunto de tecnologías que son interdependientes, como Big Data, aprendizaje profundo y, por supuesto, la IA.
Alexander Rojas ve que hacia 2030 la IA seguirá su expansión, y la veremos en varias formas más allá de su uso en cámaras. La más interesante, dijo el directivo de MediaTek, es la llamada ‘inteligencia artificial en el borde’.
«Para 2030, vamos a tener muchas aplicaciones de inteligencia artificial, pero lo más interesante es que vamos a estar en la parte de ‘edge AI’, que es inteligencia artificial en el borde. Esto se refiere a que los equipos van a tener capacidad de inteligencia autónoma, es decir, sin necesidad de conectarse a internet, como hoy lo hacemos por ejemplo a través de unas bocinas», indicó Rojas.
El director de desarrollo de negocios en MediaTek México abundó en algunos ejemplos en donde veremos la inteligencia artificial en el borde.
«(Lo veremos en industrias) en la parte de seguridad donde necesitemos reconocimiento facial, que hoy en día ya existe, pero va evolucionar a que el dispositivo pueda tomar las acciones él solo. También vamos a estar viendo industrias donde las máquinas puedan tomar decisiones de forma autónoma, sin la intervención humana. También lo vamos a estar viendo en diferentes aplicaciones más de tipo recreativo, por ejemplo en los gimnasios, donde tengamos entrenadores personalizados sin la necesidad de interacción humana», agregó.
Para entender el potencial de la IA, el doctor Enrique Portillo dio una definición simplificada del término, la cual rescata una cuestión que se mejorará cada vez más hacia 2030: la imitación de la conducta humana.
«Sería difícil de explicar como un concepto autónomo o simplificado, dado que en realidad tiene múltiples aristas, pero por cuestiones prácticas lo describiré como la capacidad de las máquinas para analizar, entender, proponer y aprender de manera autónoma, imitando la conducta humana, pero potenciando su capacidad», explicó Portillo.
Tú, yo, todos… donde sea
Estamos en la generación de los datos. La conexión se volverá cada vez más rápida. Y por tanto diversos procesos se agilizarán, además de crearse otros nuevos que facilitarán las tareas cotidianas.
Algo tan común como las conferencias online puede volverse un caos solo por no tener una buena conectividad de internet. Microsoft cree que esto ya no será problema y que incluso haremos contacto en forma de holograma.
Hasta la fecha hemos visto muchos intentos de hologramas e ilusiones ópticas a lo largo de la última década (Tupac y Freddie Mercury en 2012, por mencionar ejemplos famosos), pero nada cercano a estar artificialmente en una oficina a miles de kilómetros de la tuya.
“El tema de hologramas también es muy importante. ¿Esto para qué puede servir? Por ejemplo, para temas de presentaciones. Con un dispositivo y hologramas vamos a poder hacer una especie de telepresencia, donde yo pueda ver en una habitación un holograma tuyo mientras que tú estás en otra parte de la ciudad, y viceversa”, señaló Francisco Corona, director de servicios de la nube y empresariales de Microsoft México.
“Este punto se basa en la disrupción del cómputo en la nube. El tener servicios de innovación que se están integrando actualmente: Big data, analítica integrada, machine learning, Deep learning, dispositivos cognitivos, inteligencia artificial, desarrollo para temas de hologramas. Cuando ya tengamos una computadora cuántica que ya nos permita empezar a desarrollar nuevas tecnologías de información, va a ser la explosión que yo espero”, agregó Corona.
Siguiente época de la humanidad
Red 5G, blockchain, realidad aumentada, vehículos autónomos, Big Data, ciberseguridad. Los cambios tecnológicos se encuentran en desarrollo y en algunas partes ya están ocurriendo. Pero la transformación ‘futurista’ no se queda solo con eso: puede ir más allá de lo que imaginamos.
“La diferencia para ese entonces (2030) es que estaremos explorando la siguiente época de la humanidad. La época donde la simbiosis humano-tecnológica finalmente encuentre un clímax. En ella, si no hemos desarrollado para entonces la capacidad de regenerar o reponer artificialmente nuestros órganos o partes esenciales de nuestro cuerpo a partir de la tecnología 3D, nuestros cerebros estarán conectados a la nube; ya existen los primeros experimentos en este sentido”, señaló el profesor de la Escuela de Negocios del Tecnológico de Monterrey.
Con los cerebros conectados a la nube, indicó Enrique Portillo, comenzará una nueva etapa de virtualidad.
“La ‘singularidad’, como la llama Ray Kurzweil, se hará presente y habremos subido para entonces nuestros cerebros a la nube y tendremos ‘cuerpos virtuales’ para no depender de nuestros frágiles cuerpos físicos. Así como se lee, las películas de ciencia ficción como Matrix podrán ser una realidad”, finalizó Portillo.
Fuente: El Financiero