No cabe duda que, con un lipstick rojo, todas las mujeres nos sentimos más guapas, arregladas, coquetas y poderosas.
De acuerdo con un estudio realizado por la división R&D de Chanel, en el Gettysburg College de Pensilvania, un lipstick rojo contribuye a balancear nuestra complexión, así como a lucir más jóvenes a lo largo del tiempo.
Conforme envejecemos, nuestra piel se vuelve más oscura, pero los ojos, labios y cejas se tornan más pálidos. Cuando usamos un lipstick rojo, se balancea nuestra complexión y la imagen general, luce más brillante.
Por otra parte, al usar lipsticks rojos nos tomamos más ‘selfies’, lo que ocurre porque nos sentimos a gusto con nosotras mismas, con nuestra apariencia y, desde luego, queremos compartirlo con los demás -aunque hay gente que abusa-.
En Harvard, efectuaron una investigación con más de mil chicas sobre sus hábitos de uso de lipstick y detectaron que las chicas que usan tonos rojos de manera regular, aproximadamente se toman tres autorretratos a la semana; en tanto, quienes utilizan colores claros o nude se toman uno. Ello demuestra que al emplear colores fuertes, nos sentimos mucho más seguras de nosotras mismas.
Cabe citar que, en 2011, otro estudio de Harvard, concluyó que en un ambiente laboral, las chicas que usan lipstick rojo son percibidas como más competente. Por ello, si estás buscando un aumento o mejorar de puesto, no estaría de más que uses labiales fuertes algunos días de la semana.
Incluso, la Universidad de Bretagne-Sud, en Francia, reveló que las meseras que usan lipstick rojo reciben más propinas que quienes no se pintan los labios.
