En el planeta existen miles de tratamientos de belleza y salud, desde mascarillas y ejercicios hasta menús y cremas. Empero , pocos tienden a llamar tanto la atención como ‘beber orina’.
Si bien suena asqueroso, muchos afirman que tomarla y aplicarla ayuda para mejorar la piel, perder peso y sentirse más jóvenes.
Según Daily Mail, ésta terapia ha adquirido más adeptos con el paso de los años, uno de ellos es Christo Dabraccio, un meteorólogo de Idaho de 49 años.
Según su testimonio, cuando escuchó hablar por primera vez de la terapia sintió asco, sin embargo, cuando lo venció y lo intentó, comenzó a sentirse como ‘Superman’.
“Estoy cargado de energía, me siento mucho más joven y tengo una piel radiante. Es como una fuente de juventud”, asegura Dabraccio.
A pesar de esto, los expertos advierten que no hay evidencia de que la práctica tenga algún beneficio, pues no se ha realizado ninguna investigación independiente sobre el tema. Paralelamente, especialistas en riñón están alertando que ingerir demasiada orina puede conducir a una acumulación de desechos tóxicos similar a los efectos de la insuficiencia renal.
“No hay absolutamente ninguna evidencia científica que sugiera que la terapia con orina tenga algún valor terapéutico. Quienes beben su propia orina no hacen más que burlarse de sí mismos”, subraya el profesor Henry Woo, cirujano urológico de la Universidad de Sídney.
