El gato de una mujer de la ciudad británica de Brístol, tiene un nuevo hábito que sorprendió a su dueña, Sally Bell.
Reporta el diario Metro, que el minino, llamado ‘Avery’, empezó a llevar a su casa gafas de natación (goggles), en vez de los pájaros o ratones de antaño.
REGRESARLAS A SUS DUEÑOS
Ya suma ocho ejemplares de gafas, y eso que la casa de su dueña no se ubica cerca de ninguna piscina. Sally no sabe si son de una casa vecina o de dónde.
Dice que sólo quiere devolver los objetos a sus dueños, pues las gafas son de niños y no quiere que ningún pequeño “tenga problemas” por haberlas extraviado. O, peor aún, que el travieso gato, las haya hurtado.
The confused cat owner lives nowhere near a swimming pool or leisure centre ?♀️https://t.co/5SaBe74S6Z
— Metro (@MetroUK) July 15, 2020
