El Cenapred, junto con especialistas de la UNAM, han tendido a mejorar el Atlas Nacional de Riesgos, un mapa que permite saber en dónde se localizan las principales fracturas que afectan la infraestructura tanto en la Ciudad de México como en el resto de la nación.
¿En qué zonas de riesgo vivimos? ¿A qué estamos expuestos? Especialistas de la UNAM y del Cenapred mostraron y mejoraron el Atlas Nacional de Riesgos, que permite conocer la ubicación de las principales fracturas que afectan la infraestructura de la Ciudad de México y del resto del país.
Para conocer de manera cientifica este fenómeno y detectar las zonas de mayor riesgo en la capital del país, la investigadora del Centro de Geociencias de la UNAM, la doctora Dora Carreón Freyre, encabezó por encargo del Centro Nacional de Prevención de Desastres (Cenapred) un mapa digital que muestra zonas de fracturas.
Junto con Carlos Valdés González, director general del Cenapred, se dio a la tarea e presentar esta herramienta en la conferencia de medios Análisis de la vulnerabilidad física a la subsidencia y agrietamiento en la Ciudad de México, en el edificio Mario Molina de la Facultad de Química.
Los especialistas dieron a conocer que el mapa señala las zonas de vulnerabilidad en rojo, verde y amarillo, que explica el grado de intensidad con que un fenómeno sucede. Esa es una de las partes en donde la población tiene que tomar acciones para una nueva reubicación, afirmaron los especialistas.
La investigación consideró, entre otros aspectos, la elaboración de un mapa de fallas y fracturas geológicas de la capital de la nación, el cual fue incorporado al Atlas Nacional de Riesgos, y podrán ser consultados por el público en general, para conocer la situación en la que se encuentra la zona en la que viven.
“Es posible visualizar en dónde se encuentran estos hundimientos y subsidencias, en dónde estamos y a qué estamos expuestos, precisó Carlos Valdés, director del Conapred, quien refirió que los interesados pueden ingresar a la página www.atlasnacionalderiesgos.gob.mx.
“El Atlas identifica la vulnerabilidad física del suelo de la Ciudad de México (y el país) y estima la fragilidad social en zonas de fracturamiento. Este problema afecta de diferente manera a la población, dependiendo del nivel socioeconómico”, dijo por su parte la doctora Dora Carreón, quien elaboró el estudio.
La idea -señalaron- es que la información debe de estar disponible para la gente y de una forma que sea entendible y adecuada. “Si el fracturamiento es importante, la recomendación es no esperarse y tomar acciones para no poner en riesgo a la familia”, advirtió el titular del Cenapred.
Constituye un reto -dijo- tanto para las los investigadores como para las unidades de gobierno, “para tomar acciones que eviten posibles desastres”.
Eventualmente el poder de la naturaleza se va a manifestar, los fenómenos no tienen una solución, “pero tienen medidas de mitigación y podemos convivir con ellas”, consideró por su parte la investigadora universitaria.
De acuerdo con el estudio, hay 12 sitios de la capital del país con deformación crítica, ubicados en colonias de Iztapalapa, Iztacalco, Tláhuac, Cuauhtémoc, Benito Juárez y Xochimilco, señaló Carreón Freyre.
Fuente: El Financiero
