Desde Seúl, el secretario de Estado de Estados Unidos, Mike Pompeo, insistió en que Washington aún quiere la desnuclearización “completa” de Corea del Norte, con base a lo acordado en la cumbre entre el presidente Donald Trump y el líder norcoreano, Kim Jong-Un.
En una rueda de prensa, celebrada tras una reunión con sus homólogos de Corea del Sur y Japón, Kang Kyung-wha y Taro Kono, Pompeo subrayó que el Gobierno Trump sigue apostando por la “desnuclearización completa, verificable e irreversible”, por la que abogó antes de la cumbre.
Las palabras de Pompeo, recogidas por la agencia Yonhap, llegan en respuesta a la vaguedad de los términos empleados en la declaración conjunta que Kim y Trump firmaron al final de su histórica cita en Singapur el martes.
NUEVA ERA DE PAZ
Trump y Kim firmaron un texto en el que se comprometen a abrir una nueva era de relaciones y a establecer “una paz estable y duradera”, mientras Washington brinda garantías de supervivencia al régimen y ambos trabajan para lograr la desnuclearización de la península coreana.
Sin embargo, no se detallaron mecanismos concretos ni plazos de implementación para ninguno de los puntos, algo que según Washington se irá negociando en sucesivas conversaciones.
Pompeo también aseguró en la rueda de prensa que no se relajarán las sanciones sobre Corea del Norte antes de alcanzar la mencionada “completa desnuclearización” y que Kim “entiende la urgencia” que requiere un proceso que, aseguró, se implementará de manera “secuencial y con condiciones”.
ALIANZA SEÚL-WASHINGTON
Con respecto a la suspensión de maniobras conjuntas anuales de Corea del Sur y Estados Unidos, anunciada por sorpresa por Trump al término de la cumbre, la canciller surcoreana, Kang Kyung-wha, descartó que la alianza Seúl-Washington se vaya a resentir por este motivo y dijo que es un tema que “deben decidir mediante conversaciones las respectivas autoridades de defensa”.
Corea del Norte considera estos ejercicios como un ensayo para invadir su territorio, por lo que las palabras de Trump se interpretan como una concesión hacia el régimen para lograr que avance en su desnuclearización.
Pompeo, quien también se reunió con el presidente surcoreano para detallarle los resultados de la cumbre, viaja hoy a Pekín para continuar la ronda de contactos regionales tras la histórica cita en Singapur.