Marco Antonio Escobedo
A un hombre de la tercera edad, acusado de violar a una pequeña de escasos tres años, le fue cercenado su miembro viril y tres de sus dedos fueron cortados en represalia por la presunta agresión sexual.
El sujeto, identificado como Francisco de Souza, de 66 años, fue hospitalizado en la Santa Casa de la ciudad de Barretos, en Brasil, donde los doctores intentaron reimplantarle el pene. Pero ello no fue posible.
El sexagenario es sospechoso de haber abusado sexualmente de la niña en una hacienda en la que trabajaba como vigilante, en Severinia.
ESPERAN IDENTIFIQUE A SUS ATACANTES
El comisario Marcelo Pupo indicó a la prensa que en el momento del ataque, el anciano estaba consciente, por lo que espera que pueda identificar plenamente a sus atacantes.
Aunque la investigación forense sobre la supuesta agresión sexual de la infante no concluye aún, Pupo anotó que existen diversos indicios que llevan a concluir que sí existió “violación de vulnerable”.