Esta semana, el actor que interpretó a Jar Jar Binks en las precuelas de Star Wars, Ahmed Best, admitió que el fracaso de la trilogía lo hizo pensar en el suicidio. La noticia dividió opiniones, entre los comprensivos y los que afirmaron que el actor no tenía la culpa por el soso personaje, sino los guionistas de las precuelas de Star Wars.
Después de leer algunos comentarios, James Gun, director de Guardianes de la Galaxia, escribió en su cuenta de twitter que “La gente necesita relajarse”, y después de eso se dispuso a compartir su opinión:
“Las personas que respondieron a esta publicación dijeron: “Sí, no fue culpa del actor ¡Es [culpa] del escritor!” están perdiendo el sentido. Critíquenlo. [Digan] no me gustó, pero escupir odio y bilis a los individuos que sólo hacen su mejor esfuerzo para contar una historia, incluso si la historia es mala, es un asco ¡No la vean!”
Después, Gunn tuvo una crisis emocional y aprovechó el drama de Ahmed Best para externar lo que siempre ha sentido sobre los fans tóxicos.
“Star Wars (o cualquier película) puede ser importante para ti, pero no te pertenece. Si tu autoestima depende de lo buena que pienses que es la Guerra de las Galaxias actual, o tu infancia está arruinada porque no te gusta algo en una película ¡Vayan a terapia!”, afirmó
Su opinión evidentemente no cayó bien entre los fans de Star Wars, y no nos referimos sólo a los tóxicos, sino a la comunidad en general. Hasta ahora no ha hecho más comentarios al respecto, pero el hilo de la conversación crece y crece, así que seguramente las cosas no se quedarán así.
People need to chill out. https://t.co/2gdc3VakzC
— James Gunn (@JamesGunn) 4 de julio de 2018
