La Ciudad de México se tiñó de luto el día de ayer, justo antes del inicio de la marcha en defensa del Poder Judicial. Una valiente agente de la Policía Auxiliar (PA) perdió la vida debido a un devastador infarto cardíaco mientras se encontraba en las inmediaciones del Metro Bellas Artes, ubicado en la Línea 2, en la alcaldía Cuauhtémoc.
Una Tragedia en el Corazón de la Ciudad
La trágica noticia se difundió con rapidez entre los ciudadanos, quienes se preparaban para la marcha en apoyo al Poder Judicial. La víctima, una mujer de entre 40 y 45 años, era parte del Sector 65 de la PA y estaba comisionada a la vigilancia en las cercanías de la estación del metro.
De acuerdo con los relatos de sus colegas, esta mañana había concluido su turno y se dirigía a su hogar. Como tantos otros servidores públicos, su labor diaria era garantizar la seguridad y el orden en la ciudad que nunca duerme.
Sin embargo, alrededor de las 10:30 horas, mientras caminaba por la Avenida Hidalgo, justo frente a la majestuosa Alameda Central, la vida de esta valiente agente dio un giro desgarrador.
La Respuesta ante la Emergencia
Fue un momento desgarrador para quienes pasaban por la escena. Al ver a la mujer desplomada en la acera, no dudaron en solicitar asistencia médica de emergencia.
Prontamente, sus compañeros de la agente llegaron al lugar, seguidos de cerca por los profesionales del Equipo de Rescate y Urgencias Médicas (ERUM) y el equipo de Protección Civil. Sin embargo, la situación era crítica.
Los paramédicos hicieron lo que estaba en sus manos para salvar su vida, pero, lamentablemente, solo pudieron confirmar la tragedia. El infarto había cobrado su precio.
El cuerpo sin vida de la agente fue cubierto con una sábana azul, un símbolo sombrío de la pérdida que la comunidad policial y la ciudad han experimentado.
Un Largo Adiós
El lugar se mantuvo bajo resguardo durante casi una hora, mientras el personal de la Fiscalía de la Ciudad de México realizó los peritajes y procedió al levantamiento del cuerpo.
Este triste episodio sirve como un recordatorio sombrío de los sacrificios que realizan los servidores públicos, como esta valiente agente de la PA, en su deber diario de proteger a la ciudadanía.
Previamente a la marcha en defensa del Poder Judicial en la Ciudad de México, una policía dejó un vacío irreparable en su familia y en la comunidad a la que servía.
