En general, los estereotipos del estudiante retraído y tímido en contraposición al atlético y popular, es una realidad. Recientemente, un estudio reveló que las personas más inteligentes tienen menos amigos que la media común.
Asimismo, indicó que en los núcleos donde hay mayor densidad poblacional -por ejemplo, el centro de las grandes ciudades- la gente está más “insatisfecha”, en comparación con quienes habitan pequeños núcleos -barrios más despoblados o pueblos-, lo cual denominaron “Teoría de la Sabana”.
De acuerdo con esta hipótesis, en el proceso evolutivo, el ser humano vivió millones de años en pequeñas comunidades de no más de 150 individuos, donde se sentía más feliz. Lo cual significa que vivir en enormes núcleos urbanos con cientos de miles o millones de habitantes, resulta antinatural para la especie.
Este trabajo sociológico afirma que, aquellos que con cierta frecuencia ven más a los amigos, son personas más “satisfechas” frente a los que se aíslan, sin embargo, para quienes poseen una inteligencia elevada, ver a los amigos reiteradamente, resulta negativo, concluyó la investigación promovida por los doctores Norman P. Li y Satoshi Kanazaw.
En general, los estereotipos del estudiante retraído y tímido en contraposición al atlético y popular, es una realidad. Recientemente, un estudio reveló que las personas más inteligentes tienen menos amigos que la media común.
