La aspirante presidencial de la oposición, Xóchitl Gálvez, ha sacudido la política mexicana con una declaración. En un país donde el presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) es una figura dominante, Gálvez anunció con determinación que asumirá la presidencia de México en tan solo un año. Esta declaración ha revolucionado el panorama político del país.
Gálvez dejó claro que no obedece a ningún hombre ni responde a ningún grupo político. Su mensaje es directo: ella se debe solo a su propia convicción y al pueblo mexicano.
Un Fuerte Apoyo Popular
Xóchitl Gálvez se reunió con aproximadamente dos mil seguidores en un salón del Parque Tomás Garrido Canabal. Esta muestra de apoyo fue organizada por el PRD y el senador Juan Manuel Fócil, aspirante a la gubernatura de Tabasco. Gálvez ha logrado unir a diversas fuerzas de la oposición en su búsqueda por el liderazgo del país.
Gálvez visitó Comalcalco, un municipio que ha estado bajo el control de Morena, el partido de AMLO. A su llegada, un grupo de aproximadamente diez personas la recibió con gritos de “¡Fuera, fuera!” Sin embargo, Gálvez no se amedrentó y se acercó a los manifestantes.
El Cambio en Marcha
Poco después, la situación cambió drásticamente para la candidata de oposición. En un salón de fiestas con jardín, miles de seguidores mostraron su apoyo a Gálvez.
Jesús Zambrano, líder del PRD, enfatizó la importancia de la competencia política en la tierra de AMLO. Con elecciones a menos de un año de distancia, esta declaración de Xóchitl Gálvez promete una contienda electoral vibrante y llena de emoción.
A un Año del Cambio
Mientras el gobierno de AMLO se acerca a su fin, Xóchitl Gálvez no muestra signos de retroceso. Su promesa de asumir la presidencia dentro de un año es un recordatorio de que en la democracia mexicana, todo es posible. El futuro político de México está en juego, y Gálvez ha desatado revuelo en la nación.
