La inflación de México se desaceleró a principios de marzo debido a la disminución de los precios de la gasolina, dejando margen para que el Banco de México reduzca aún más las tasas de interés a medida que la pandemia de coronavirus y una caída del petróleo ponen al país al borde de la recesión.
Los precios al consumidor se elevaron 3.71% respecto de un año antes, informó el martes el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) del país, levemente superior a la mediana de 3.68% proyectada en una encuesta a economistas realizada por Bloomberg. Los precios subieron 0.11% respecto de las dos semanas anteriores. Banxico tiene una meta inflacionaria de 3%, más o menos un punto porcentual.
El Banco de México recortó la tasa de interés clave en medio punto porcentual a 6.5% el viernes en su primera decisión no programada en cuatro años, debido a la crisis de los mercados financieros en medio de los temores por el coronavirus.
El gobernador de Banxico, Alejandro Díaz de León, dijo a Bloomberg News después de la decisión que la entidad bancaria está preparada para tomar medidas fuera de su planificación regular nuevamente si es necesario.
La semana pasada, los economistas redujeron la proyección del producto interno bruto de México para 2020 en medio de una creciente probabilidad de una recesión mundial provocada por la pandemia. Ahora se estima que el país se contraerá 3% frente a la expansión de 0.7% de la semana anterior, según una encuesta de Citibanamex.
Incluso después de reducir la tasa clave en 1.75 puntos porcentuales desde agosto, México tiene una de las tasas de interés ajustadas a la inflación más altas entre las economías más grandes del mundo.
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Fuente: Infobae